¿Cómo es un árbol de olivo?
El árbol de olivo es un árbol de hoja perenne, esto significa que sus hojas no se caen en otoño como las de otros árboles. Tiene una altura que oscila entre los 8 y 15 metros y su tronco puede tener un diámetro de hasta 1 metro.
Las hojas del árbol de olivo son de color verde grisáceo y tienen una forma alargada y estrecha, con bordes lisos y una textura similar a la del cuero. Además, estas hojas desprenden un aroma muy característico.
La corteza del árbol de olivo, por otro lado, es de color grisáceo o marrón claro y se caracteriza por tener una textura rugosa y surcada por pequeños surcos que se van haciendo cada vez más profundos conforme el árbol envejece.
Las ramas del árbol de olivo son flexibles y resistentes, y están cubiertas de pequeñas hojas agrupadas en racimos. Además, estas ramas pueden crecer en cualquier dirección y en ángulos irregulares, haciendo del árbol de olivo un árbol único y llamativo.
Finalmente, la fruta del árbol de olivo es la conocida aceituna, de la que se obtiene el aceite de oliva. Estas aceitunas suelen ser de color verde al principio, pero van adquiriendo un tono morado o negro a medida que maduran. Además, su forma es redondeada y con una pequeña hendidura, lo que las hace fácilmente reconocibles.